El Gobierno oficializó el cierre definitivo del Procrear: qué pasará con los créditos, inmuebles y el Banco Hipotecario. Después de más de una década en funcionamiento, el Gobierno nacional confirmó este lunes el cierre definitivo del programa Procrear, la histórica iniciativa de créditos para la vivienda. La medida fue oficializada mediante la Resolución 764/2025 del Ministerio de Economía, publicada en el Boletín Oficial.
La resolución establece el desmantelamiento total del Fondo Fiduciario Público Procrear, creado en 2012, y delega a la Secretaría de Obras Públicas la responsabilidad de ejecutar el proceso de liquidación. Esta cartera deberá garantizar la continuidad de los procesos financieros vigentes y la adecuada disposición de los bienes asociados al programa.
A pesar de la disolución del fondo, el Banco Hipotecario continuará con la administración de los créditos individuales aún vigentes, manteniendo las condiciones originales establecidas al momento de su otorgamiento. Para esto, se firmará un nuevo Contrato de Mandato para la Gestión de Créditos Individuales entre la entidad bancaria y el Ministerio de Economía.
En paralelo, la resolución instruye a la Dirección Nacional de Normalización Patrimonial —dependiente de la Secretaría Legal y Técnica— a encargarse de la cobranza de los créditos, incluyendo la posibilidad de vender carteras con bajo rendimiento, es decir, aquellas que generen menos del 40% del retorno esperado. Esta área también deberá afrontar los eventuales procedimientos judiciales que puedan surgir del proceso de cierre.
Los inmuebles del programa que no estén bajo contratos de obra vigentes deberán ser transferidos a la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE). Esta acción ya había sido anticipada en el Decreto 1018/2024, firmado en noviembre del año pasado, cuando se anunció por primera vez la intención de disolver el Procrear.


Además, el Ministerio de Economía podrá ceder unidades a provincias, municipios, la Ciudad de Buenos Aires, institutos de vivienda u otros organismos del Estado nacional, siempre con intervención previa del Tribunal de Tasaciones de la Nación. En los casos en que las tierras o inmuebles hayan sido originalmente aportados por jurisdicciones locales, se evaluará la posibilidad de restitución total o parcial a sus propietarios originales.
En los considerandos de la resolución, el Gobierno reconoce la dificultad de amplios sectores de la población para acceder a la vivienda propia, especialmente en un contexto de inflación elevada y restricciones crediticias. Sin embargo, justifica el cierre del programa con un argumento central:
“La financiación de la construcción de viviendas es una actividad propia y principal de los bancos comerciales, privados y públicos, por lo que no se justifica la intervención del Estado en esa materia”. Este anuncio oficial va en línea con lo expresado días atrás por el vocero presidencial Manuel Adorni, quien había adelantado en redes sociales que el Procrear, “tal y como lo conocemos, dejará de existir”.
Como parte del nuevo esquema de políticas habitacionales, el Gobierno anticipó la implementación de un sistema de hipotecas divisibles, orientado a proyectos inmobiliarios en desarrollo bajo gestión del sector privado. Esta iniciativa busca reemplazar el modelo estatal de financiamiento habitacional por un modelo de mercado.
Con esta medida, la administración de Javier Milei pone fin a uno de los programas de vivienda más emblemáticos de los últimos años. Desde su creación en 2012, el Procrear otorgó miles de créditos a familias de todo el país, y dejó una huella profunda en la política habitacional argentina.
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