Encuesta revela que uno de cada cuatro estadounidenses teme una guerra civil tras las elecciones. Según un sondeo reciente, la percepción de inestabilidad y división en EE.UU. ha alcanzado niveles alarmantes, con un 68 % que considera que el país está fuera de control.
La polarización en Estados Unidos está alcanzando niveles alarmantes de acuerdo con un reciente estudio realizado por YouGov para The Times y SAY24, un proyecto de las universidades de Stanford, Arizona y Yale. Según la encuesta, uno de cada cuatro estadounidenses considera probable que tras las próximas elecciones presidenciales se desate una guerra civil en el país.
Del total de encuestados, un 6 % piensa que un conflicto civil es “muy probable” y un 21 % lo considera “algo probable”, reflejando una inquietud significativa sobre la estabilidad social y política. Este temor se enmarca en el contexto de unas elecciones que enfrentarán a la actual vicepresidenta Kamala Harris y al expresidente Donald Trump el próximo 5 de noviembre.
La encuesta también revela un panorama pesimista sobre el futuro del país: un 39 % de los estadounidenses cree que los mejores días de EE.UU. han quedado en el pasado, mientras que el 68 % opina que la situación actual está “fuera de control”. Estas percepciones reflejan la tensión y el desgaste de la confianza en la dirección del país.
Un país profundamente dividido
El estudio destaca también una marcada fractura en la sociedad estadounidense, con un 84 % de los ciudadanos que asegura que el país está más dividido que hace una década. Estos sentimientos de división y pesimismo evidencian las dificultades para lograr consenso y estabilidad en un contexto cada vez más polarizado.
A medida que se acercan las elecciones, la percepción de un posible conflicto y las preocupaciones por el futuro subrayan la urgencia de alcanzar acuerdos en una sociedad donde las divisiones políticas y sociales parecen haber llegado a un punto crítico. / Grupo La Provincia
