Desde el retorno de la democracia en 1983, Argentina ha transitado un camino económico signado por fuertes oscilaciones ideológicas, crisis recurrentes y reconfiguraciones institucionales. En este escenario, el peronismo —movimiento político fundado por Juan Domingo Perón en la década de 1940— ha jugado un papel protagónico, tanto por su prolongada permanencia en el poder como por la heterogeneidad de sus propuestas económicas.
A lo largo de cuatro décadas, distintos gobiernos de raíz “¿peronista?” han impulsado políticas que van desde la liberalización de los mercados y las privatizaciones, hasta modelos intervencionistas con fuerte presencia estatal. Este análisis se propone recorrer los principales direccionamientos económicos impulsados por gobiernos peronistas y pseudo-peronistas en ese período, identificar sus características y contrastarlos con los proyectos alternativos, para comprender el impacto real del peronismo en la economía argentina reciente.
La política económica de Argentina en los últimos 40 años ha estado marcada por múltiples vaivenes ideológicos y de orientación, con una presencia significativa de gobiernos identificados como “peronistas”, aunque el término engloba posiciones económicas muy diversas —desde el intervencionismo estatal hasta políticas más liberalizadoras según el contexto y la facción interna del peronismo. Veamos un desglose por períodos desde 1983 (retorno de la democracia) hasta 2025:
Gobiernos y sus orientaciones (1983–2025):
Raúl Alfonsín (1983–1989)
Política: Socialdemócrata, con fuerte intervención estatal al principio; luego adoptó planes de estabilización (Plan Austral).
Resultado: Crisis inflacionaria al final de su mandato.
Carlos Menem (1989–1999)
Política: Neoliberal, reformas estructurales, privatizaciones masivas, convertibilidad peso-dólar.
Resultado: Estabilidad inicial con crecimiento, luego desempleo alto y vulnerabilidad externa.
Fernando de la Rúa (1999–2001)
Política: Continuación de la convertibilidad, ajuste fiscal.
Resultado: Crisis del 2001, colapso institucional y económico.
Eduardo Duhalde (2002–2003)
Política: Salida de la convertibilidad, fuerte intervención del Estado.
Resultado: Recuperación económica inicial tras el colapso.
Néstor Kirchner (2003–2007)
Política: Heterodoxa, superávit fiscal y comercial, control estatal en áreas clave.
Resultado: Crecimiento fuerte, baja del desempleo.
Cristina Fernández de Kirchner (2007–2015)
Política: Continuación de heterodoxia, estatizaciones (YPF, AFJP), subsidios, control de precios y tipo de cambio.
Resultado: Alta inflación, tensiones cambiarias, pero también crecimiento e inclusión en períodos.
Mauricio Macri (2015–2019)
Política: Liberal, apertura externa, endeudamiento, acuerdo con el FMI.
Resultado: Recesión, inflación alta, fuga de capitales.
Alberto Fernández (2019–2023)
Política: Heterodoxa, controles de capitales, emisión monetaria, subsidios.
Resultado: Alta inflación, deuda creciente, crisis macroeconómica.
Javier Milei (2023–actualidad)
Política: Ultraliberal, desregulación, plan de ajuste profundo, cierre del Banco Central como objetivo declarado.
Resultado: En curso, con fuerte impacto social y discusión sobre su sostenibilidad.
¿Qué entendemos por ideología económica de Perón?
El peronismo original, sobre todo en su primera etapa (1946–1955), se caracterizó por:
Industrialización por sustitución de importaciones (ISI)
Fuerte intervención del Estado en la economía
Políticas sociales amplias (derechos laborales, redistribución del ingreso)
Defensa de la soberanía económica (nacionalización de sectores estratégicos)
Alianza entre capital y trabajo (modelo de comunidad organizada)
¿Cuáles gobiernos siguieron esa línea “peronista clásica”?
Sí se alinean con la ideología de Perón:
Eduardo Duhalde (2002–2003)
Estatismo moderado, salida del modelo de mercado puro post-crisis, contención social.
Néstor Kirchner (2003–2007)
Fuerte rol del Estado, crecimiento con inclusión, renegociación de deuda desde la soberanía, expansión de derechos.
Cristina Fernández de Kirchner (2007–2015)
Continuidad del modelo anterior, nacionalización de empresas clave (YPF, AFJP), subsidios al consumo y protección industrial.
Alberto Fernández (2019–2023)
Pese a resultados discutibles, su enfoque intentó seguir la línea kirchnerista, con control estatal, énfasis en lo social y en la protección del mercado interno.
No se alinean con la ideología de Perón, pese a ser “peronistas” de partido:
Carlos Menem (1989–1999)
Aplicó un modelo neoliberal, privatizó empresas estatales, abrió la economía, redujo el rol del Estado. En la práctica, antiperonista en términos doctrinarios.
No peronistas, ni por partido ni por ideología:
Raúl Alfonsín (UCR)
Fernando de la Rúa (Alianza)
Mauricio Macri (PRO)
Javier Milei (LLA)
Resultado: 4 gobiernos aplicaron políticas que se pueden considerar peronistas en el sentido ideológico original.
