Nueve de cada 10 jóvenes enfrentan dificultades para trabajar. El 70% de los encuestados dijo que aceptó empleos en áreas que no son de su interés, según un informe de Junior Achievement y la consultora Manpower. El momento de empezar a trabajar suele presentar desafíos para los jóvenes. La inserción en el mercado de trabajo para aquellos que tienen entre 18 y 29 años está cruzada por la falta de experiencia, la incompatibilidad de horarios laborales y la escasez de oportunidades en áreas de interés.
Estas son algunas de las dificultades que expresan la mayoría de los jóvenes, según un informe de la asociación civil Junior Achievement y la consultora ManpowerGroup. Según el informe, nueve de cada 10 jóvenes tienen dificultades para ingresar al mercado laboral. El 72% indicó que la falta de experiencia es el principal obstáculo para encontrar empleo formal; la incompatibilidad de los horarios laborales (48%), el segundo, y la escasez de oportunidades en áreas de interés (43%), el tercero.
En este contexto, los jóvenes eligen priorizar un salario competitivo y el crecimiento profesional a la hora de buscar un trabajo. De hecho, 7 de cada 10 declararon haber trabajado en áreas que no son de su interés: el 32% por necesidades económicas urgentes y el 23% por falta de experiencia. El informe también destaca una disparidad entre los puestos buscados por los jóvenes y las vacantes disponibles. Las áreas donde los jóvenes más están interesados en insertarse son ventas y atención al cliente (43%), Marketing y Publicidad (18%) y Tecnologías de la Información (18%).
Por su parte, las empresas tienen más vacantes para cubrir en ventas y atención al cliente (14%), finanzas y bienes raíces (13%) e ingeniería (11%). A su vez, las principales herramientas de búsqueda de empleo para los jóvenes son: redes sociales (90%), a través de familiares y amigos (69%), y buscando directamente en sitios web de empresas (51%); mientras que las empresas ofertan trabajo mediante redes sociales (21%), contactos referidos (19%) y bolsas de trabajo universitarias (13%).
“La dificultad que manifiestan los jóvenes para insertarse en el mercado de trabajo es realmente alarmante. Por eso, creamos experiencias educativas de aprendizaje activo que les permiten desarrollar competencias clave a edades tempranas”, afirmó Bernardo Brugnoli, director ejecutivo de Junior Achievement en Argentina.
“Los resultados de este estudio son un llamado de atención sobre las barreras que enfrentan los jóvenes para ingresar al mercado laboral en Argentina. Desde el ámbito empresarial, es esencial que colaboremos para reducir estas brechas, fomentando más capacitación y promoviendo oportunidades que respondan a sus expectativas y aspiraciones”, añadió Luis Guastini, director General y presidente de ManpowerGroup Argentina y Director de Talent Solutions para Latinoamérica. De acuerdo al relevamiento de Manpower, las principales dificultades de la empresas en la contratación de jóvenes son la falta de experiencia y de habilidades humanas (20%) y expectativas salariales y beneficios superiores a los ofrecidos (18%).
El desafío de la informalidad
Según datos del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (Cippec), el 63% de los jóvenes que trabajan lo hacen en condiciones de informalidad. La informalidad puede ofrecer una manera de acumular experiencias y aprender habilidades, aunque también puede convertirse en una precarización permanente. El desempleo es otro problema crítico. Unicef informa que la tasa de desempleo en el segmento de 18 a 24 años es casi tres veces superior a la tasa general. Este fenómeno, agravado por el contexto económico, aumenta la demanda de empleo entre los jóvenes y provoca interrupciones en sus carreras educativas.
A su vez, el último informe del Instituto de Estadísticas y Censos de la Ciudad de Buenos Aires (IDECBA) indica que el 35,4% de la población joven asalariada se encuentra en condición de precariedad laboral, guarismo que está muy por encima del correspondiente al total de la población asalariada de la Ciudad. “Cuando a este segmento se le adiciona la porción de los que se desempeñan como cuenta propia, la tasa de precariedad laboral llega al 39,3%”, se precisó.
