Evangélicos buscan ser fuerte oposición en la política

Con vistas a las elecciones 2021 consolidan su armado territorial en todo el país: Los evangélicos apuestan a posicionarse como un amplio espacio político opositor. Se trata del partido Una Nueva Oportunidad (UNO). En una asamblea general nacional decidió “ser parte de un frente opositor al gobierno nacional". Apuestan a que en cada provincia donde tiene presencia tenga libertad de de acción para hacer alianzas.

Dirigentes del movimiento evangélico quieren pasar a ser protagonistas y considerando que el próximo escenario de elecciones legislativas de medio término puede ser una buena medida, están dando los primeros pasos para consolidar su presencia nacional, después de haber sido codiciados como actores secundarios.

El pasado lunes 15 y martes 16, en la ciudad de Rosario, se llevó a cabo la asamblea general nacional del partido Una Nueva Oportunidad (UNO), con representantes de 12 de las 14 provincias donde ya está presente este espacio político.

Allí se formalizó la junta promotora nacional del partido, con una integración federal, presidida que el diputado provincial Walter Ghione (Santa Fe), secundado por Ana Valoy (Tucumán), Leandro Jacobi (Entre Ríos), Diego Villamayor (PBA) Gabriela Sosa (Corrientes), Roberto Torres (La Pampa) y Óscar Krause (Formosa), teniendo como objetivo que a fin de este año que varias provincias cuenten con personería nacional.

En el marco de ese encuentro en Rosario, la asamblea decidió “ser parte de un frente opositor al gobierno nacional”, en lo que fue la primera y principal definición política, identificando al kirchnerismo y la gestión nacional como el adversario de las próximas elecciones. Después, se decidirá la estrategia territorialmente.

"Cada provincia tendrá que interactuar con los espacios que ya viene trabajando, pero tiene libertad de acción para hacer alianzas”, explicó al respecto Ghione, quien integró la lista que encabezó Amalia Granata —que en 2019 sacó 287 mil votos y logró seis bancas— y una dirigente cercana a UNO, la diputada nacional Dina Rezinovsky, llegó al Congreso en la boleta de Juntos por el Cambio.

El movimiento evangélico tiene gran presencia en todo el país, y UNO además de los territorios mencionados en la promotora, está constituido en Chubut, Chaco, CABA, Córdoba, Mendoza, Neuquén y Salta. “Necesitamos representatividad, ser parte de las decisiones que nos competen a todos —señaló Ghione—. Queremos ocupar lugares de decisión”.

"Habiendo elaborado ya su propia agenda desde los valores cristianos, con temas sociales y económicos, de seguridad, salud y educación, ha decidido dejar de formar parte de la “militancia” de otros espacios y tener vuelo propio", señalaron desde el espacio que constituye un fenómeno que va más allá de la coyuntura política argentina como pasó con Jair Bolsonaro en Brasil, Estados Unidos o México. / La Noticia1